Un pequeño de tan solo 4 años perdió la vida de una manera muy penosa en la guardería Angels Childcare Center, Auckland, Nueva Zelanda. El niño fue identificado como Aldrich Viju, quien fue encontrado sin vida en un tobogán de juegos, pero los trabajadores de la guardería no saben cuánto tiempo estuvo allí antes de que fuera encontrado.
El niño se estaba lanzando por un tobogán de plástico cuando la cuerda de un zanco de juguete le envolvió el cuello y lo estran-gulo hasta quitarle la vida, dijo un forense.
El niño en edad preescolar estuvo en el centro menos de una hora cuando otro niño lo encontró inconsciente, pero nadie sabe cuánto tiempo estuvo tirado.
El personal podía ver el tobogán, excepto, atención a esto, por el punto ciego si un niño estaba acostado.
El niño que encontró el cuerpo de Aldrich les dijo a dos trabajadores que su amigo “estaba durmiendo y no se estaba despertando”.
El personal intentó revivirlo. Jiae Kwon, el maestro que encontró al niño de cuatro años, dijo que su corazón latía pero que no estaba respirando.
“La cuerda se enredó en la parte superior del tobogán y agarró el brazo de Aldrich”, dijeron las autoridades.
Un testigo que no se identificó, dijo en la investigación que Aldrich fue visto con un amigo, sonriendo y sosteniendo su mano momentos antes de que sucediera el caso.
El forense dijo que el lamentable hecho no podía haberse anticipado, pero advirtió que cualquier juguete con una cuerda o puede ser peligroso, ya que los niños juegan con objetos de formas inusuales.
La madre de Aldrich, Gisha, inconsolable dijo que nunca quiere que ningún niño pierda la vida como le pasó a su hijo.