La alegría de la Navidad como cada año, se enciende en esta ciudad, con la iluminación y el encendido de luces de colores brillantes y adornos alusivos a la época navideña, los parques y plazas, con hermosas y finas decoraciones que llenan estos espacios.
La Navidad, época de amor, paz y alegría, es una vieja tradición, cultural-religiosa, en la que se conmemora el nacimiento del Niño Jesús, se ve con los festejos esa llegada cuando la familia va cada noche y fines de semanas, a rememorar tan importante fecha hace más de dos mil años,.
La ciudad de Moca, esta alegre, se activa el comercio y se siente la brisa con aire navideño, en la que la gente, el ciudadano en medio de las precariedades en que vive la mayoría de la población, celebra y saca tiempo para compartir y festejar en familia el nacimiento del Niño Dios.
El parque Cáceres, centro de atención de esta decoración navideña, acuden familias entera a disfrutar de estas luces brillantes, adornos y presentaciones alusivas a la Navidad, que también sirve de entretenimiento a niñós, jóvenes y adultos.
La plaza del Agricultor da la bienvenida al visitante en la autopista Ramón Cáceres, con el gigantesco arbolito navideño, que al igual que el parque Cáceres, sus decoraciones magistralmente instaladas con su embellecimiento y decorado corresponden al ayuntamiento municipal y otras instituciones públicas.
Los detalles no faltaron, las luces brillantes y sus decoraciones, han llenado de vuelta el espíritu de la Navidad en cada familia, niños, jóvenes y adultos, la pasión de soñar con la Navidad.
En esta época compartir las tradiciones en familia y transmitir esos valores culturales religiosos, la importancia de dar y recibir, de ser solidarios, de alimentar el espíritu y de disfrutar de las pequeñas cosas de la vida, se convierten en el mejor regalo que podemos ofrecer a nuestros seres queridos, amigos y relacionados en tan especial ocasión.
Ese espíritu de la Navidad, lleno de nostalgias, recuerdos y vivencias, se reviven con cada visita a estos lugares de sano entretenimiento en familia, nos remonta a ese pasado de nuestra niñez mágica y fantástica de la Navidad.
