Un hombre que mantenía cautiva a su esposa que amenazó con dejarlo y a su hija mató a balazos a tres policías del condado Floyd, en Kentucky, que habían acudido a la escena, y a un perro e hirió a otras cinco personas.
La Oficina del Alguacil del Condado Floyd identificó a las víctimas fatales como el capitán de la policía de Prestonburg, Ralph Frasure; el ayudante del alguacil, William Petry; y el manejador del can, Jacob Chaffins.
El sospechoso, identificado como Lance Storz, de 49 años, fue detenido por las autoridades luego de unas cinco horas de enfrentamiento con oficiales que arribaron a su vivienda con una orden de arresto por un incidente de violencia doméstica.
Storz, que estaba armado con un rifle, abrió fuego desde el interior e impactó a los oficiales la tarde del jueves.
Storz prácticamente se atrincheró en el interior de la vivienda y mantuvo cautivas tanto a su esposa como a su hija. La Policía Estatal de Kentucky informó que otros cuatro oficiales resultaron heridos y que uno de estos permanece en condición crítica. Un quinto sobreviviente fue identificado como civil.
La esposa y la hija del sospechoso salieron ilesas del enfrentamiento.
“Ellos encontraron puro infierno cuando llegaron. Ellos no tuvieron oportunidad”, describió el alguacil del condado Floyd John Hunt a reporteros en la escena.
Según el jefe policial, los agentes ni siquiera habían hecho contacto inicial con el hombre cuando este empezó a disparar. Tomó horas establecer desde dónde exactamente estaba disparando Storz, ya que este tenía un plan.
“(El sospechoso) era un puro terrorista…él era un terrorista en una misión”, describió el alguacil.
El acusado permanece detenido en la prisión del condado Pike.
