RD.- Dando seguimiento al caso del hombre que supuestamente revivió en su velorio en el sector Cancino Adentro, provincia Santo Domingo, República Dominicana.
De acuerdo a la información obtenida, la muerte de Julio Alberto Vinicio Pierre se produjo luego de que un vecino haitiano le hiciera una brujería tras una discusión.
Tras complicarse su salud, fue llevado al Hospital Francisco Moscoso Puello. La causa del deceso fue problemas pulmonares.
Su familia y amigos lo siguen velando, aferrados a las ‘señales de vida’ que ha dado desde el ataúd. El velatorio se está celebrando en su propia casa, en Cancino Adentro, Santo Domingo Este.
Dicen que el difunto traga, no tiene el abdomen hinchado, sus dedos se estrellan y suenan. Piden que le inyecten adrenalina, para insuflarle una bocanada de aliento.
Rosanny Santana, su mujer, está convencida de que el muerto podría levantarse con la magia de un artilugio médico.
Esperan que sea un nuevo Lázaro. Hicieron una demostración. Michael, su amigo y vecino, lo agarró por detrás del cuello mientras le echaba por la boca un chorro de agua.
Lo hizo varias veces hasta que el vaso se secó. Fue una demostración de que, aun después de muerto, el joven puede beber agua, acaso para rehidratarse en esta (o en la otra) vida.
Lo sacaron del féretro y lo tendieron en un colchón a ras del piso, dentro de la vivienda.
Después de todo, el muerto parece vivo. Los ojos están medio abiertos, como mirando a su gente; tiene camisa y pantalón largo, y las manos tienen el aspecto de un hombre vivo.
Otro vecino le hizo un conjuro o especie de ensalmo, untándole en las manos un polvo blanco en forma de cruz. También le introdujo algodón por los hoyos de la nariz. Dicen que está hechizado porque un haitiano le hizo «brujería».
Todos esperan que resucite como Lázaro, porque siguen creyendo que el muerto está vivo. ¡No lo van a enterrar hasta que se levante, como lo hizo Lázaro hace dos mil años!