En el barrio El Hoyo, del sector Herrera en Santo Domingo Oeste, se suscitó un trágico suceso el pasado jueves a las 6:00 de la tarde, donde dos hombres se disputaron el amor de una mujer en un presunto punto de drogas, resultando en una persona fallecida.
La víctima fue identificada como Ariel Cuevas, quien según su madre, Venecia Altagracia Arias Cuevas, formaba parte de una banda delictiva. La madre relató la odisea que vivió en un intento por alejar a su hijo de acciones delictivas.
La madre expresó que vivió muchas noches de angustia y derramó lágrimas tras enterarse de la pertenencia de su hijo a la banda. Ariel se dedicaba al robo y venta de drogas, y a pesar de los consejos de su madre y otros familiares, no escuchaba razones.
‘Ese muchacho me tenía harta ya, ese muchacho me dio muchos dolores de cabeza. Ahora puedo descansar, no te imaginas las lágrimas que he derramado’, manifestó la madre mientras esperaba el cuerpo de su hijo en el Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif) el viernes.
La madre aseguró sentir una vergüenza tan grande que no podrá realizar el velatorio de Ariel Cuevas en su residencia, ya que no tiene ánimos para hacerlo. El cuerpo será sepultado de inmediato en el cementerio municipal de Los Alcarrizos una vez que el Inacif le entregue el cuerpo.
La madre narró cómo su hijo comenzó consumiendo sustancias ilícitas, las cuales ‘fueron quemando poco a poco su cerebro’.
‘Dejó los estudios para juntarse con personas peligrosas. Tenía una vida normal de niño hasta que los delincuentes mayores lo llevaron por malos caminos. Empezó con la marihuana, luego la cocaína y finalmente el crack’, precisó.
Ariel Cuevas deja en la orfandad a dos hijos.
A pesar de tener 36 años, Ariel Cuevas no había sido declarado legalmente, lo que retrasará el proceso de entrega del cadáver, ya que su madre debe cumplir una serie de requisitos para poder recibir el cuerpo.
La madre también expresó su queja por la complicada burocracia que debe enfrentar para obtener la entrega del cadáver de su hijo. DL
