Santo domingo.- María Infante, una mujer que fue mantenida prisionera y amenazada de muerte por una banda de individuos haitianos, vivió momentos de desesperación y angustia mientras era obligada a conseguir dinero para su liberación.
Ante los gritos de la señora y la voz de alerta de un menor que se encontraba presente, los haitianos se vieron obligados a huir por la parte trasera de la vivienda, aprovechando la construcción incompleta del muro fronteriz.
El cual fue fácilmente superado debido a su vulnerabilidad. Esto permitió que los delincuentes regresaran a su país.
María Infante, quien fue acorralada mientras salía al patio para alimentar a un cachorro, hizo un llamado al presidente Luis Abinader para que se termine lo más pronto posible la construcción de la verja perimetral.
Con el objetivo de evitar que bandas haitianas crucen al territorio dominicano para cometer actos delictivos.