Tras varias semanas de negociaciones, lo que era un secreto a voces finalmente se ha hecho oficial, Michael Jordan ha concretado la venta de los Charlotte Hornets, logrando así uno de los negocios más lucrativos de su carrera tras el ya conocido pacto con la marca deportiva Nike.
Luego de convertirse en accionista mayoritario de la franquicia de la NBA hace 13 años por $275 millones de dólares, Jordan ha vendido su parte por un valor de $3,000 millones de dólares según ESPN, a un grupo liderado por Gabe Plotkin, quien ya era accionista minoritario del equipo y Rick Schnall, socio de los Atlanta Hawks.
A través de un comunicado, la leyenda de la NBA expresó el “enorme honor” que ha sido ser propietario de los Hornets en esta última década, aunque no reveló los motivos que lo llevaron a vender el equipo del cual seguirá siendo accionista minoritario.
“Estoy orgulloso de todo lo que logrado la organización: los emocionantes momentos en la cancha, recuperar el nombre de los Hornets, Charlotte como sede del Juego de Estrellas y HSE (Hornets Sports and Entertainment) transformándose en un auténtico pilar de esta comunidad”, expresó el seis veces campeón de la NBA.
“Al hacer la transición a ser un dueño minoritario, estoy encantado de pasar las riendas a dos líderes exitosos, innovadores y estratégicos como Gabe y Rick”, agregó Jordan, que como dueño, no logró tener el mismo éxito que como jugador. De hecho, solo alcanzaron los ‘playoffs’ en una ocasión.
Los dueños de equipo de la NBA aprobaron la venta de los Hornets gracias al hecho de que Plotkin ha sido socio minoritario de los Hornets desde 2019 y Schnall es socio de los Hawks de Atlanta desde 2015, por lo que el nuevo grupo no será ajeno a la liga.