Gabriel Santana Borsilea, uno de los siete acusados por el Ministerio Público en relación con un fraude de 2,500 millones de pesos en la Cooperativa de Ahorros y Crédito Herrera (Coop-Herrera), se muestra dispuesto a resarcir los perjuicios causados a los ahorrantes de dicha institución financiera.
Se ha descubierto que, de manera independiente, debe aproximadamente 6 millones de dólares a personas que se vieron afectadas por el presunto fraude, lo que equivale a unos 340 millones de pesos.
Santana Borsilea, según la acusación, utilizó a 120 personas físicas y jurídicas para llevar a cabo el fraude, simulando préstamos y creando supuestas inversiones.
Sin embargo, él sostiene que desconocía la participación del administrador general de la cooperativa, Jorge Eligio Méndez, en la alteración de los sistemas con datos falsos.
Cuando Santana Borsilea descubrió la ilegalidad de los certificados financieros, supuestamente su reacción fue de negación, pero desde entonces, ha mostrado disposición para devolver el dinero a los ahorrantes afectados.