Lo que parecía una noche perfecta terminó en una desgracia para Deisy Lisset Sánchez Guerrero, de 19 años, quien fue una de las dos víctimas mortales del tiroteo que se registró la madrugada de este lunes en el sector Guachupita, del Distrito Nacional.
Deisy había salido a celebrar y despedirse junto a sus amigas, debido a que el próximo lunes 13 de noviembre emprendería un nuevo camino a reunirse con su madre en España.
Su hermana, quien se iba junto a ella hacia España, no le salían las palabras tras estar en estado de shock por la situación. Según sus familiares, Deisy se iba junto a ella a España y era más que una hermana al manifestar que era su confidente en todo.
Hace apenas unos meses, Deisy lanzó una línea de productos para el cuidado del cabello, un emprendimiento que nació con el propósito de costear sus estudios. A pesar de los cambios que le deparaba el futuro, nunca abandonó su sueño de convertirse en enfermera, continuando sus estudios en la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD).
Entre lágrimas, su abuela evoca los tiempos felices, recordando a la nieta que siempre destacó por su buen corazón y prudencia. Sin embargo, aquella noche, decidió compartir risas y momentos con sus amigas, quienes la animaron a disfrutar antes de partir.
«Para mí, ella era mi nieta, mi hija y mi amiga», expresó Yenni Suazo, quien espera el cadáver de su nieta para darle el último adiós.
El cuerpo de Deisy aún aguarda en el Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif). El velatorio se llevará a cabo en la funeraria frente al hospital Ciudad Sanitaria Luis Aybar.
Durante el enfrentamiento también falleció Richarson Jones Méndez, de 26 años, quien está siendo velado en el sector La Ciénaga, en el Distrito Nacional.
De acuerdo con las versiones de los comunitarios del lugar, el enfrentamiento entre bandas de originó para vengar la muerte de una persona, por la cual culpaban a Richarson.
Familiares del joven aseguraron que este no tenía nada que ver sobre el hecho, por lo que piden justicia a las autoridades.