He sido docente por más de cuatro décadas en los sectores público y privado de la educación pre-universitario, y en diferentes universidades también.
Primero lo hice en el público cuando en el 1978, con la egregia educadora Cándida Silvia Santiago a la cabeza y otros, fundamos el liceo nocturno de Monte de la Jagua, hoy Cándida Silva Santiago de Jornada Extendida.
En el 2010, fundé junto a otros meritorios docentes, el liceo vespertino de ese mi distrito municipal de origen, fundido los dos para formar el mencionado anteriormente de tanda extendida.
Hoy, viéndome reunido con estos jóvenes del colegio Porfirio Morales de Moca que dirijo y le he dedicado más de 42 años trabajando con niños, niñas y jóvenes, le doy gracias a Dios por permitirme aún seguir sirviéndoles a los niños, niñas y jóvenes de la provincia Espaillat.
Ese es mi placer. Mi satisfacción mayor junto al muy temprano placer que siempre he tenido de leer y escribir. Jubilado con 32 años en el servicio docente del sector público: gracias, Dios, por permitirme mantener mi vocación de maestro aún con los mejores valores en alto.
La gloria es para Ti, Padre Santo. No hay mayor Reconocimiento que ése. En el ámbito de Dios no existen las mezquindades, y yo estoy en ese ámbito donde Jesucristo es el mejor juez. Esa es mi mayor recompensa, mi mejor Diploma, mi mejor Honor.
Por eso le doy gracias al Padre Celestial porque aún sigo viento en popa trabajando en Educación, leyendo y escribiendo, con los mismos valores de siempre, y ese es mi mayor Homenaje de parte de Dios y la sociedad.