Para asistir al acto de toma de posesión de su padre y presidente de la República, las hijas de Luis Abinader: Graciela Lucía, Esther Patricia y Adriana Margarita Abinader Arbaje, escogieron tres modelos de vestidos de estampas geométricas.
Con esta decisión, las hijas del presidente Abinader lograron un estilismo juvenil y audaz a partes iguales.
Completaron el look con peinados muy de vanguardia y oportunos para la temporada de calor: cabello de efecto mojado, semi recogido y ponytail baja.
En relación al maquillaje, Graciela, Esther y Adriana optaron por uno totalmente nude.
Mientras que para el calzado, escogieron estiletos en color negro tal y como exige el protocolo.
Las cortes geométricos picos, cuellos rectos y reestructurados se llevaron todo el protagonismo consiguiendo un look minimalista.
Finalizadas las actividades relacionadas con la ceremonia de toma de posesión, la agenda marcaba el momento para celebrar en un ambiente más distendido y ameno. Esta vez no se organizó una cena de gala como en años anteriores.
Por motivo de la pandemia se realizó un almuerzo y el número de invitados fue drásticamente reducido a 100 comensales. Pero no dejó de ser un encuento elegante, sobrio y colmado de exquisitos detalles.
El nuevo mandatario eligió para sus invitados una propuesta gastronómica de incuestionable calidad. Sin embargo, para el primero de sus banquetes como Presidente no incluyó en la selección una receta que exaltara la riqueza y el sabor de la cultura gastronómica dominicana.
Quienes tuvieron el privilegio de ser elegidos para compartir con las nuevas autoridades en el salón Las Cariátides del Palacio Nacional, disfrutaron de un menú a cuatro tiempos, en el que la entrada fue una sopa de papa francesa servida a temperatura ambiente, conocida como crema vichyssoise.
