Un tribunal de Nevada ha sentenciado a Clarence Martin Jr. a cadena perpetua con la posibilidad de libertad condicional, luego de que fuera hallado culpable de la muerte de su hija, London, quien tenía apenas dos meses.
La tragedia ocurrió en 2020, cuando el hombre, de 37 años, arrojó a su bebé desde el balcón de su apartamento. La jueza de distrito, Carli Kierny, no pudo evitar expresar su conmoción ante el caso, calificándolo como “el peor que he visto en mi vida” durante la audiencia de sentencia.
El dramático suceso se desató tras una discusión entre Martin y su prometida, la madre de la bebé, que derivó en el fatal acto de violencia.
Según las autoridades, London cayó desde una altura de más de 6 metros hasta el pavimento, lo que le causó heridas mortales.
La policía llegó rápidamente al lugar y encontró a la madre de la niña intentando realizar maniobras de reanimación cardiopulmonar (RCP). La bebé fue trasladada de urgencia a un hospital cercano, pero no pudo sobrevivir.
El crimen no terminó ahí. En un intento por encubrir lo sucedido, Martin provocó un incendio en el interior del apartamento, lo que dañó varios bienes materiales y resultó en la muerte del perro de la familia.
Después de cometer estos actos, el acusado huyó del lugar y fue detenido más tarde en las cercanías del Aeropuerto Internacional Harry Reid, donde intentaba escapar.
En el momento de su detención, vestía una camiseta de seguridad de la TSA, lo que generó más inquietudes sobre su estado mental.
Durante el juicio, se reveló que Martin padecía un trastorno esquizoafectivo, según documentos judiciales.
Su abogada defensora, Betsy Allen, argumentó que su cliente no tenía recuerdos claros del incidente, llegando a afirmar que “pensó que estaba en una película”.
Estas palabras fueron citadas por medios locales como el Las Vegas Review-Journal, quienes señalaron el grado de delirio en el que Martin se encontraba en el momento del crimen.
Las autoridades confirmaron que la investigación en torno a los hechos sigue abierta, pero la sentencia de cadena perpetua resalta la gravedad de un crimen que ha dejado a la comunidad conmocionada y que, según la jueza Kierny, marcará un antes y un después en su carrera profesional.
Previamente declarado culpable por un panel en octubre pasado, Martin fue acusado de una serie de cargos severos por la muerte del pequeño, incluyendo cargos gemelos de abuso infantil, negligencia o puesta en peligro con daño físico grave, iniciar un incendio a propósito, maltrato animal, varias acusaciones de asalto y agresión con consecuencias fatales e intento de asesinato con un arma letal, como se indica en los documentos legales.
jueza de distrito Carli Kierny
