Altagracia Pérez, una mujer que hace unos meses salvó milagrosamente su vida luego de ser víctima de un brutal ataque, presuntamente de parte de su expareja, aún no ha podido vivir con tranquilidad desde entonces, pues su agresor, Ramón García, continúa asechándola y posiblemente no descansará hasta verla bajo tierra.
El suceso ocurrió en Puerto Plata, en una fatídica noche cuando ambos transitaban en un motor por la carretera principal de San Marcos, cuando García la habría atacado con varias est0cadas con un arma blanca en una zona oscura, creyendo este que le había apagado la vida.
El hombre que no ha sido detenido todavía por las autoridades, al parecer ha sido protagonista de un reciente acto de intimidación hacia Pérez, con la colocación de un letrero con una cruz en la casa de su hijo, advirtiendo que eso es lo que le espera por supuestas traiciones con un individuo llamado Eliézer.
La situación ha llevado a Altagracia Pérez a vivir oculta y temerosa por su vida. La angustia y el miedo han afectado no solo su bienestar emocional, sino también su estabilidad laboral, habiendo perdido su empleo debido a esta situación.
Ante esta escalofriante realidad, Pérez hace un llamado desesperado a las autoridades para que actúen con prontitud y den con el paradero de este despiadado hombre.
Temiendo por su vida y la seguridad de su familia, Pérez espera que las autoridades intervengan antes de que sea demasiado tarde.
