Dos organizaciones de derechos humanos solicitaron este sábado al Ministerio de Salud Pública intervenir la cárcel de Najayo-Hombres, de San Cristóbal, al denunciar un presunto brote de coronavirus en esa penitenciaría.
La Asociación de Familiares de Detenidos, Desaparecidos y Desacatados (Afamidesa) y la Defensoría de los Derechos Humanos de los Inmigrantes (Dededin), filial San Cristóbal, revelaron que de acuerdo a reportes de los propios reclusos, 16 de ellos están contagiados de enfermedad COVID-19.
El portavoz de ambas entidades, José A. Thomas, dijo en nota de prensa que a pesar de que los contagiados están en aislamiento, los demás reclusos manifestaron su temor de estar infectados también, ya que a pesar de que compartían celdas con los afectados, no le han realizado pruebas.
El activista pidió la pronta intervención de la directora regional de Salud, María Elexia Bautista; del procurador de la Corte de Apelación de San Cristóbal, Jonathan Baro; del gobernador Julio César Díaz, y de la procuradora fiscal Rosa Fadulia, a fin de evitar el “desasosiego” en el que supuestamente se encuentran los reclusos de Najayo.
Los reclusos han manifestado a esas entidades de derechos humanos, según Thomas, que carecen de mascarillas, guantes, alcohol y otros insumos básicos de protección, por lo que pidieron ir en su auxilio.
Además, dijeron que en el penal existe una “gran cantidad” de internos que sobrepasan los 65 años, quienes presuntamente no han sido tomados en cuenta durante la pandemia, a pesar de su vulnerabilidad.