RD.- Se mantiene en diagnóstico reservado en la unidad de cuidados intensivos, uno de los dos agentes de la Policía Nacional, por el hecho que resultó sin vida Rubén Darío Jiménez y otro el hombre que lo acompañaba, en una cabaña de la autopista San Isidro, en Santo Domingo Este.
En su más reciente informe, la policía explicó que este agente resultó he-ri-do en el abdomen y en una pierna. El otro no salió ileso, pero se encuentra en condición estable en el hospital docente de la institución.
Esperamos que este agente que no ha sido identificado se recupere de este evento, para que Rubén Darío no complete a seis el número de personas que se habría llevado a la tumba.
¿Por qué decimos para que no complete seis? Porque hasta el momento cinco personas perdieron la vida por su culpa. Los cuatro integrante de la familia Vicente y este joven de 20 años que lo acompañaba, que también perdió la vida por el.
Aunque se diga que este lo estaba ayudando, pero hay que detenerse y analizar, este muchacho José Luis Mañón Figuereo tenía apenas 20 años de edad, la inmadurez en su máxima expresión.
Tampoco nadie sabe a lo que fue sometido por Rubén Darío para que lo acompañara.
Es probable que el joven sintiera que estaba haciendo algo bueno por un amigo en apuros o que al mismo tiempo tuviera miedo de llevarle la contraria a las indicaciones de alguien que fue capaz de quitarle la vida a cuatro personas.
La pérdida de ese joven recae también en culpa de Rubén Darío. Fotos
