Carolina Torres, una dominicana de 26 años de edad y graduada ayer martes de una maestría en la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Columbia, dedicó entre lágrimas el diploma a su padre Rafael Torres.
Quien murió de COVID-19 en el hospital Presbiteriano de Queens, el 24 de abril, después de mantenerle todo su apoyo para que ella pudiera lograr una profesión.
Torres, que publicó varias fotos abrazando la foto de su progenitor después de la graduación virtual a través de Zoom, dijo que su papá siempre estuvo muy orgulloso de ella.
“Mi papá todos los días me iba a ver haciendo tareas, exámenes y siempre me decía que echara palante”, relató Torres.
Recuerda que ella y su padre compartían frecuentemente momentos de alegría juntos, bailando y celebrando sus graduaciones, éxitos y fiestas.
El padre iba a cumplir 71 años este mes, antes de morir por el virus.
“Él estuviera aquí conmigo, pero lamentablemente falleció antes de tiempo y sé que él me está mirando desde el celito lindo”, agregó Torres.
Sin poder contener las lágrimas, dijo que no tenía palabras, porque su papá quería estar en su graduación.
Para su papá, quien murió el 24 de abril por COVID-19, Carolina era el tesoro más apreciado y su gran orgullo.
La madre Carolina, señora Ramona Torres, acompañó a su hija al área del hospital Presbiteriano de la misma universidad, donde le entregó el birrete de graduación en nombre del papá.
“Aquí le entregó el birrete, que era uno de los últimos deseos de él y donde pasó los últimos momentos de su vida.Gracias papi por todo”, expresó la hija entre sollozos.
La joven agregó que “deseaba que él estuviera aquí conmigo, pero sé que me está mirando desde el cielo, así es que esto es para él. Feliz cumpleaños papá”, dijo la joven.
Antes de la graduación virtual que se inició a las 4:00 de la tarde, la madre escribió en su página facebook “yo sé que su padre estará orgulloso de ella y precisamente es el cumpleaños de él, ya que era su anhelo verla graduar.
Gracias a todos al que hizo esto posible en especial a Ydanis Rodríguez y el Dr. Rafael Lantigua y por su puesto a su padre Rafael Torres que la apoyó hasta el último momento de su vida”. Por: Miguel Cruz Tejada
