NY.- El dominicano Elvys Familia, de 38 años de edad asesina-do de un tiro en el pecho en un aparente crimen pasional en la cuadra donde vivía en El Bronx.
No era pariente de la detective dominicana Miosotis Familia del cuartel 46 en El Bronx, asesinada por un desquiciado de un tiro en la cabeza el 5 de julio 2017 también en ese condado.
Familia estaba con su hermana y otros familiares y amigos compartiendo cuatro pisos más abajo del apartamento donde vivía, dijo la policía.
La hermana, Miosotis Díaz, rechazó las teorías policiales y aseguró que se dice que Elvys estaba saliendo con una mujer que también vive en el área donde lo mataron.
Familia estudiaba para graduarse de mecánico de autos y era padre de una niña de 11 años y un hijo de 7, menores que están devastados por el asesi-nato de su papá.
Hasta el cierre de esta crónica la policía no había hecho ningún arresto y los investigadores estaban revisando los videos de cámaras de seguridad instaladas en la zona.
“La policía está diciendo pedazos y piezas”, añadió Miosotis de 47 años, quien crió a Elvys desde que era un niño. «Decían que estaba saliendo con una dama de allí o algo así».
Describió a su hermano como un padre con sus hijos.
“Están angustiados”, dijo el sobrino de la víctima Luis Familia, de 24 años, quien se reunió con otros familiares en duelo en el apartamento del cuarto piso.
«Han estado llorando por un tiempo», agregó el sobrino.
Los paramédicos encontraron a Elvys tirado en la acera fuera del edificio residencial y murió en la emergencia de la clínica comunitaria Bronx Care Health System, explica el parte policial.
La hermana dijo que su familia acababa de enterrar a la madre hace cinco meses y se reunieron para una comida al aire libre en su memoria el sábado pasado.
Un hermano de Elvys murió a principios de este año por COVID-19, informó Miosotis.
«¡Perdí a un amigo!» exclamó en español en la entrevista con el tabloide NY Daily News. “¡Solía cuidarlo todos los días, lo llevaba a la escuela, yo lo cuidé, yo lo crié», repetía la hermana desgajada en llanto.
Deja un comentario