La investigación sobre las muertes de los adolescentes dominicanos Elvis Bolquez Castillo y Jeik Anilus Lusi, ocurridas el 7 de enero, sigue en proceso.
Los jóvenes, de 16 años, viajaban como polizones en un avión de JetBlue y fueron encontrados sin vida en el compartimiento del tren de aterrizaje de un Airbus A-320 durante una inspección de rutina en el Aeropuerto Internacional de Fort Lauderdale-Hollywood, en Florida.
La aeronave había pasado por distintos destinos, como Jamaica, Nueva York y Salt Lake City, antes de llegar a Florida, atravesando temperaturas extremadamente bajas.
El informe forense determinó que la causa del fallecimiento fue asfixia debido a la falta de oxígeno dentro del avión.
Las madres de los jóvenes, Margarita Luisi Elisma e Ironelis Castillo, identificaron los cuerpos tras recibir fotografías y confirmaron sus identidades mediante pruebas de ADN. La Oficina del Sheriff de Broward viajó a República Dominicana para colaborar en el proceso de identificación.
Ahora, autoridades federales de EE.UU., como la Administración Federal de Aviación (FAA) y la Administración de Seguridad del Transporte (TSA), junto con JetBlue, investigan cómo los adolescentes lograron ingresar al avión.
Ante esta situación, el congresista dominicano-estadounidense Adriano Espaillat ha solicitado un refuerzo en las medidas de seguridad en aeropuertos internacionales para evitar que casos similares vuelvan a ocurrir.
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