El Centro Nacional de Huracanes eleva a categoría cinco de “catastrófica”, la más alta en su escala, el huracán Dorian. Mientras el archipiélago de las Bahamas recibe la tormenta, el pronóstico para la costa de Florida ha mejorado. Los últimos pronósticos estiman que la tormenta virará hacia el noreste hacia Carolina del Norte, que puede recibir la tormenta en las próximas horas -aunque ya degradada a nivel 2 o 3-.
El huracán azotará durante al menos dos días el archipiélago caribeño con lluvias torrenciales, altas olas y vientos dañinos antes de dirigirse hacia a la parte continental de los EE. UU.
Se trataría del huracán más fuerte que azota el archipiélago desde que existen registros. Algunos residentes se han trasladado a otras islas como la de Nassau para evitar sufrir la tormenta, otros se han preparado para pasar unos días sin electricidad y resistiendo a lluvias que pueden alcanzar los 61 centímetros y mareas de hasta 6 metros.
En su paso por las Islas Ábaco -situadas al norte de las Bahamas- el viento registraba unos máximos sostenidos de 280 kilómetros por hora y ráfagas puntuales de hasta 322 kilómetros por hora.
“Se espera un período prolongado de tormentas que amenacen la vida, vientos devastadores con fuerza de huracán y fuertes lluvias capaces de producir inundaciones repentinas que amenacen la vida en las Islas Abaco y Gran Bahama hasta el lunes”, dijo Richard Pasch, especialista senior en huracanes en El Centro Nacional de Huracanes.
Después de descargar en las Bahamas, se espera que la tormenta vire hacia el noroeste y se dirija a Florida. Aunque el Centro Nacional de Huracanes -NHC, por sus siglas en inglés- con sede en Miami, no espera que el huracán azote el Estado de Florida, ha emitido una alerta de tormenta tropical para la costa sureste.
En este sentido el NHC advierte a los residentes que permanezcan en alerta porqué la “llegada del huracán a Florida todavía es posible”. Asimismo los estados de Georgia y Carolina del Sur también han elevado los niveles de alerta y las autoridades han llevado a cabo simulacros para hacer frente a la tormenta.
Aunque Dorian podría no pisar suelo estadounidense en su máxima virulencia, los restos del huracán podrían azotar la población con fuertes vientos, intensas lluvias y grandes oleadas.
La mayoría de los turistas que quisieron salir de las Bahamas lo hicieron antes del cierre del aeropuerto principal del archipiélago el viernes por la noche después de que el subdirector del departamento de meteorología de las Bahamas advirtiera que Dorian causaría períodos prolongados de grandes olas y tormentas a lo largo de la costa norte de Gran Bahama y Ábaco -dos de las islas-.