El pasado 18 de octubre del presente año, la vida de Luis Ramón Moreno Ventura, un oficial de 31 años de la Fuerza Aérea de la República Dominicana (FARD), fue truncada en un trágico incidente.
La vida de Moreno Ventura fue arrebatada debido a impactos de proyectiles efectuados por desconocidos que intentaron robarle su motor mientras se dirigía a su hogar en el sector Los Peralejos, kilómetro 13 de la autopista Duarte, en el Distrito Nacional.
La esposa del fallecido, Karolain Pablo Adón, lamentó la profunda tristeza de su hija de un año, quien extraña diariamente a su padre. La madre del fallecido, María Ventura, expresó su inmenso sufrimiento y la búsqueda constante de respuestas desde la tragedia.
Recordó emocionada que la última vez que vio a su hijo fue la mañana del fatídico día, cuando él la llevó a su trabajo, una rutina diaria.
El padre de la víctima, Ramón Moreno, instó a las autoridades a dedicar todos los esfuerzos posibles al caso, recordando que su hijo era militar y que en el país, cuando las autoridades se comprometen, resuelven los casos. Destacó la necesidad de no dejar impune el crimen de sangre de su hijo.
La familia de Luis Ramón exige justicia y hace un llamado a las autoridades para que no dejen el caso en el olvido. Mencionaron su preocupación por la falta de avances en la investigación y esperan que la revisión de las cámaras de seguridad del Sistema de Emergencias 9-1-1 arroje pistas cruciales.
Hoy cumpliría 10 años en la FARD Moreno Ventura, sin enbargo eso nunca podrá pasar. Una emotiva ceremonia en su memoria reunió alrededor de 205 personas en su iglesia local. Fue sepultado en el cementerio Cristo Salvador de Santo Domingo Este.
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