El FBI buscó localizar documentos clasificados relacionados con armas nucleares, entre otros artículos, cuando los agentes allanaron esta semana el complejo de Mar-a-Lago del expresidente Donald Trump en Palm Beach, Florida, dijeron a The Washington Post personas familiarizadas con la investigación.
Las personas no ofrecieron detalles adicionales al Post sobre «qué tipo de información buscaban los agentes» o si se recuperaron dichos documentos, según el periódico.
La revelación agrega un contexto clave a la extraordinaria decisión del Departamento de Justicia de registrar la casa de un expresidente. Como informó anteriormente CNN, la investigación criminal comenzó con preocupaciones sobre la falta de documentos planteadas por los Archivos Nacionales, que hicieron una remisión penal al Departamento de Justicia al descubrir documentos altamente confidenciales entre los materiales recuperados de Mar-a-Lago en enero.
Las 15 cajas contenían algunos materiales que formaban parte de programas especiales de acceso (SAP), una clasificación que incluye protocolos para limitar significativamente quién tendría acceso a la información, según una fuente familiarizada con lo que los Archivos descubrieron en las cajas. Eso condujo a entrevistas del FBI con ayudantes de citaciones del jurado investigador para la búsqueda e incautación de documentos autorizada por el tribunal de esta semana.
Aunque el secretario de Justicia de EE.UU., Merrick Garland, se ha negado a compartir detalles específicos sobre el registro, este jueves dijo que «aprobó personalmente» la decisión de solicitar una orden judicial para el allanamiento de la casa de Trump en Florida.
“El departamento no toma esa decisión a la ligera. Siempre que sea posible, es una práctica estándar buscar medios menos intrusivos como alternativa a una búsqueda y limitar el alcance de cualquier búsqueda que se lleve a cabo”, dijo Garland en una conferencia de prensa.
El secretario de Justicia también dijo que el Departamento de Justicia había presentado una solicitud ante el tribunal para que se revelaran la orden de allanamiento y el recibo de propiedad del allanamiento.
Trump y su equipo legal aún no han tomado una decisión sobre cómo responder a la moción del Departamento de Justicia, dijo a CNN una fuente familiarizada con su pensamiento.
Desde la búsqueda, los principales republicanos del Congreso se han apresurado a defender a Trump, calificando la medida como políticamente motivada. El expresidente ha negado haber actuado mal, alegando que la investigación tiene como objetivo descarrilar su posible intento de regresar a la Casa Blanca.
En un par de publicaciones en Truth Social luego de la declaración de Garland, Trump continuó afirmando que sus abogados estaban «cooperando plenamente» y habían desarrollado «muy buenas relaciones» con los investigadores federales antes del allanamiento del lunes en Mar-a-Lago.
La orden de allanamiento había sido autorizada por un tribunal federal, dijo Garland.
«Es un delito federal retirar documentos clasificados incorrectamente. Entonces, si está completando esa declaración jurada y tiene que enumerar el delito, puede incluirlo como el delito», dijo Elie Honig, ex fiscal federal y estatal y analista legal senior de CNN, siguiendo la orden de allanamiento.
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