RD.- Siguen los hechos lamentables en las calles del país, ahora la comunidad de Llanos de Pérez, en Imbert, llora la pérdida de otro hijo suyo en accidente de tránsito.
Se trata del joven de el joven Anthony Ariel Trejo Ventura, quien era guía turístico de los 27 charcos de Damajagua, este fue impactado por un vehículo en la autopista Puerto Plata – Navarrete. El choque fue lo suficientemente fuerte que le quitó lo más preciado, la vida.
Queremos apoyar a sus familiares y seres queridos en tan difícil momento, ya que se necesita fuerzas para seguir adelante.
Cada accidente automovilístico tiene un alto costo para la sociedad, sea que los pasajeros pierdan la vida o queden mal heridos. Muchos jóvenes, por ejemplo, pierden la vida o quedan incapacitados por un accidente.
Montarse en un vehículo o en un motor en la República Dominicana es una ruleta rusa.
Zumban los motores que se meten por cualquier espacio entre los carros. Lo mínimo que hacen es rayar los vehículos, pero, sobre todo, exponen sus vidas y la de personas que transportan detrás (a veces niños), generalmente sin casco ni ningún tipo de protección.
La solución no es crear más instituciones del tránsito. Eso es bulto y disparate. El reto es reducir la corrupción en el Estado para que las autoridades pongan multas legítimas a todo el que viole las leyes de tránsito.