El suceso tuvo lugar en el Condado de Pender, cuando el matrimonio se disponía a coger su coche para acudir al veterinario para llevar a su gato. Las imágenes fueron grabadas por la cámara de vigilancia de su casa, lo que permitió inmortalizar el ata-que del felino que resultó tener la rabia una vez sometido a un examen.
El primero en salir de la vivienda era el marido, que tranquilo y de buen humor salía de casa por la mañana, seguido de su mujer que portaba a su mascota en un trasportín cuando ocurrió todo.
En el vídeo se aprecia como antes de abalanzarse sobre la mujer, el felino comienza a hacer unos ruidos extraños, similares a los que hacen los gatos domésticos.
Tras esto, en seguida comenzaría el ataque hacia la mujer, a quien atacó por la espalda propiciando arañazos e intentando morderla.
Salvación rápida
La suerte que corría la víctima es que su marido estaba justo al lado y pudo y tuvo el valor de quitarle al animal violento de encima, ya que, de no ser así, las condiciones en que habría terminado el ataque habrían sido muy distintas.
«Me salvó la vida», contaba Kristi Wade a WECT. «No sé dónde estaría o en qué forma estaría ahora si él no hubiera estado allí».
El hombre, al escuchar a su pareja correr y gritar, actuó rápidamente y acudió en su auxilio.
Cogió en volandas al animal rabioso y lo tiro contra el suelo, algo que menos mal hizo rápido, ya que de tener menos habilidad podría haber sido at-aca-do también.
Con todas sus fuerzas lanzó al animal contra el suelo, que tardó poco en salir corriendo y huir bajo los coches. «Literalmente podía sentir el diente en mi nudillo», decía.
Abatió él mismo al peligroso animal
Como bien se aprecia en las imágenes, el animal salía corriendo, pero no pasó desapercibido para Wade, esposo de la víctima.
Así, teniendo permiso de armas, se tomó la libertad de buscar al gato montés y, cuando dio con su paradero lo disparó y consiguió abatirlo.
«Sabía que tenía que tener algo, así que pensé que era rabia», añadía al medio mencionado. «Sabía que ya había atacado a dos personas; si atacaba a otra persona y yo no hacía algo, moralmente me habría molestado durante mucho tiempo».
Cuando las autoridades tuvieron conocimiento de los hechos, publicaron días después información al respecto.
Así, desde la oficina del Sheriff del condado de Pender, se emitía un comunicado en su página de Facebook que afirmaba que el animal fue sometido a varias pruebas en el laboratorio estatal de Carolina del Norte, lo que esclareció que el animal dio positivo en la prueba de la rabia.
De este modo, el departamento de policía aprovechaba la ocasión para recordar a los ciudadanos que las mascotas han de estar vacunadas contra la rabia.
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