Un joven patinador estadounidense evitó abordar el vuelo de American Airlines 5342, que terminó en tragedia tras colisionar en el aire con un helicóptero del Ejército de los Estados Unidos y precipitarse en el río Potomac, cerca de Washington D.C. La razón por la que no subió al avión fue que su perro excedía el tamaño permitido para viajar en cabina.
El deportista, identificado como , tenía previsto volar en la aeronave siniestrada, pero tras recibir la negativa para embarcar con su mascota, optó por viajar por tierra. «No me dejaron pasar la puerta de embarque. Sáquenme de Kansas, por favor», publicó en su cuenta de Instagram el miércoles por la noche. Más tarde, compartió una actualización en la que mencionaba haber iniciado un trayecto de 14 horas en carretera.
El vuelo 5342, operado por PSA Airlines, una filial de American Airlines, cubría la ruta desde Wichita, Kansas, hasta Washington D.C. Entre los pasajeros se encontraban al menos 14 patinadores artísticos, además de entrenadores y familiares que regresaban tras participar en el Campeonato Nacional de Patinaje Artístico de EE.UU., celebrado en la Intrust Bank Arena de Wichita.
El siniestro ocurrió el miércoles a las 20:57 ET, cuando el avión chocó con un helicóptero Black Hawk UH-60 del Ejército estadounidense a unos 120 metros de altura, momentos antes de aterrizar en el Aeropuerto Nacional Ronald Reagan. A bordo de la aeronave viajaban 60 pasajeros y cuatro tripulantes, mientras que en el helicóptero se encontraban tres personas. No se reportaron sobrevivientes.
Yevgenia Shishkova, de 53 años, y Vadim Naumov, de 56, reconocidos patinadores rusos y campeones mundiales en 1994, figuran entre las víctimas confirmadas. La organización US Figure Skating emitió un comunicado en el que expresó su profundo pesar: «Esta es una tragedia indescriptible. Mantenemos en nuestros corazones a las familias de las víctimas y seguiremos brindando actualizaciones conforme obtengamos más información».
El Departamento de Transporte de EE.UU. ha calificado el accidente como «evitable», según declaraciones del secretario Sean Duffy. «Con la información que tenemos hasta ahora, puedo decir que esto no debió ocurrir», afirmó. Por su parte, el director ejecutivo de American Airlines, Robert Isom, sugirió que el helicóptero podría haber invadido el espacio del avión, aunque aún se investigan las causas exactas del siniestro.
Equipos de emergencia continúan con las labores de rescate en el río Potomac, mientras la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte (NTSB) lidera la investigación para esclarecer los hechos. Las autoridades han prometido una revisión exhaustiva de los protocolos de seguridad aérea para prevenir futuros incidentes.
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