El dolor y el llanto se fundían ayer en abrazos de incredulidad e impotencia ante el cuerpo sin vida de Yokaira Pérez, que era velado por sus familiares y allegados en la calle 20, en el sector Alma Rosa II, al este de la capital.
Las palabras no salían. Las lágrimas eran la única vía de desahogo ante esta tragedia que ha enlutado a la comunidad que describía a Yokaira como una mujer de buen corazón, pero que desgraciadamente le fue arrancada la vida el pasado viernes por su expareja en el sector Mejoramiento Social.
Yokaira, de 29 años, fue ultimada por su expareja Walkis Arias “Dany Flow”, quien también se quitó la vida.
Los familiares de la víctima indicaron a periodistas de Listín Diario que la mujer era amenazada constantemente por Arias.
Cindy Clemente, una prima de la joven, explicó que poco antes del hecho la había llamado para amenazarla.
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