Jorgelina Estévez, una maestra afectada, ha dirigido un emotivo llamado al presidente Luis Abinader, expresando su desazón y frustración por haber reprobado el examen docente por un estrecho margen de un punto.
La maestra asegura que esta situación es una injusticia y solicita que se busquen alternativas para apoyar a los educadores, evitando la humillación que conlleva este examen.
Las palabras de Estévez ponen en relieve la tensión y preocupación en torno a las evaluaciones docentes y su impacto en la comunidad educativa. La maestra argumenta que un simple punto no debería ser motivo para considerarla incompetente en su labor educativa.
La petición de la maestra ha generado debate y reflexión sobre la forma en que se evalúa y apoya a los docentes en el sistema educativo.
El llamado de Estevez es un recordatorio de que detrás de las estadísticas y calificaciones hay profesionales dedicados y apasionados que merecen ser tratados con respeto y consideración.
La respuesta del presidente Abinader y las autoridades educativas será clave para determinar cómo se aborda este tema sensible en el ámbito educativo y cómo se puede encontrar un equilibrio entre la evaluación y el apoyo a los maestros.
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