Hombre Marlboro Robert Norris, uno de los primeros que hizo de modelo para los célebres anuncios de la marca, falleció en su ciudad natal de Colorado Springfield rodeado de su familia.
Prestó su imagen durante más de una década a la campaña que ideó Leo Burnett en 1954. Aunque siempre aparecía con un cigarrillo en la boca, él nunca fumó.
Norris aconsejaba a sus hijos que no lo hiciesen y éstos le recriminaban que anunciara cigarillos cuando no los consumía, así que, diez años después del fichaje, dejó la publicidad.
Norris fue parte de ese mundo ficticio en el que el ganado al aire libre, seguido por un vaquero, representaba los ideales del momento.
Nació en Chicago y su gran sueño era ser vaquero aunque su familia se dedicaba al mundo financiero y al de la abogacía. Ya con 18 años empezó con la crianza de caballos y en 1950 se compró su primer rancho.
Los directivos de Marlboro creyeron que, más que un modelo al uso, necesitaban a un vaquero de verdad. Y así lo encontraron. Vieron una foto de Norris junto a su amigo John Wayne y se decidieron por él. Les pareció muy auténtico para el papel. “Ya estaba sucio”, dijeron.
No fue el único hombre que formó parte de esa campaña que se extendió hasta los años setenta, aunque algunos de sus sucesores o antecesores sí que murieron por culpa del tabaco.
Deja un comentario