La influencer Dellie Isla, de 21 años, dijo que su vagina “vieja” le causaba molestias, además de que no le gustaba cómo se veía, por lo que buscó una labioplastia en abril de este año.
La labioplastia es una cirugía de remodelación de los genitales externos femeninos que permite devolver a los labios menores su tamaño y aspecto naturales, con unas proporciones normales.
Dellie narra que después de su cirugía de “vagina de diseño”, que costó casi $6,000, se enfermó y la llevaron de urgencia al hospital.
“Mi prometido terminó teniendo que llamar a una ambulancia, lo que resultó en que me llevaran al hospital y pasara 10 días en una sala de emergencias”, dijo Isla a NeedToKnow.Online.
“Regresé a casa una hora después de que se completó el procedimiento y en dos horas tenía un dolor insoportable, lo cual no es normal para este tipo de cirugía”.
Lo que se suponía que sería una recuperación pacífica resultó en tres cirugías de emergencia adicionales debido a tres coágulos de sangre diferentes que causaron un dolor “insoportable”.
“Me pusieron morfina y el hospital puso a un cirujano en espera solo para mí, además de aislarme del resto de la sala”, recordó. “El médico me explicó que estaba en un estado increíblemente malo y no recuerdo ciertos detalles de estar en el hospital por la cantidad de medicamentos que me habían puesto”.
Pero solo ocho semanas después, pudo volver a su “vida sexual normal”, ya que tener intimidad podría dificultar la curación, y se siente más segura que nunca, a pesar de los eventos traumáticos que siguieron a su procedimiento.
“Desde entonces, la cicatrización ha ido muy bien y estoy muy contenta con el aspecto general”, dijo. “Definitivamente me hizo sentir más segura de mí misma, ya que la ropa es más cómoda y es mucho mejor de lo que la encontré antes de la operación”.
“Los coágulos de sangre pueden ser un efecto secundario común de muchas cirugías, sin embargo, no estamos seguros de si simplemente tuve mala suerte o si esto fue el resultado de un error”, agregó Isla. “Debo señalar que la clínica a la que fui es de gran reputación e investigué dónde me iban a realizar el procedimiento”.
La Dra. Sarah Welsh, ginecóloga y cofundadora de los condones Hanx, dijo al medio que las labioplastias se realizan comúnmente para “reducir el dolor” y “mejorar la apariencia estética o la función de la vagina”.
“La reconstrucción o el rejuvenecimiento vaginal es una opción para las mujeres que tienen una sensación sexual disminuida (a veces después del parto), dolor vaginal durante las relaciones sexuales o el deseo de alterar el tamaño o la apariencia de sus genitales”.
Se trata de una cirugía menor, ya que es un proceso ambulatorio en el que se aplica únicamente anestesia local. La intervención tiene una duración de entre 30 y 60 minutos y, tras la pequeña intervención, la paciente se va a su casa.
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