SANTO DOMINGO.– Los “vampiros emocionales” en las relaciones interpersonales son personas que cargan a los demás con actitudes negativas, quejas constantes y victimización, lo que puede afectar significativamente la energía y estabilidad emocional de quienes les rodean, de acuerdo con la psicóloga Virginia Pérez.“Muchas cosas que nos pasan en la vida dependen de nuestra actitud. Hay personas que, con su negatividad, siempre encuentran un ‘pero’ para todo. Esas energías pueden venir de amigos, familiares o parejas, y si no aprendemos a poner límites sanos, terminamos cargándonos con sus emociones negativas”, explicó la también sexóloga en El Despertador.
La experta destacó que para proteger nuestra salud emocional es crucial identificar a estas personas y establecer barreras claras. Además, señaló que el amor propio y la sanidad individual son fundamentales para evitar caer en ciclos de justificación y victimización.Pérez también advirtió sobre los riesgos de permitir que las emociones negativas de otros afecten nuestras decisiones y actitudes. “Si me afecta y lo demuestro, le estoy dando poder a esa persona sobre mí. Es importante aprender a manejar estas situaciones desde nuestro interior y decidir cuánto poder damos a las acciones de otros”, enfatizó.¿Cómo identificarlos?La sexóloga resaltó la importancia de la autorreflexión para evitar ser parte del problema.“Un vampiro emocional vive quejándose, justificándose y comparándose con los demás. Esas actitudes no permiten evolucionar ni transformar la realidad. La clave está en asumir la responsabilidad de nuestras acciones y tomar la iniciativa para cambiar lo que no nos hace felices”, explicó.
