El desarrollo económico de un país está, entre otros elementos, estrechamente relacionado con la importancia de contar con infraestructuras de calidad para poder competir en el mercado internacional y tener la capacidad de mover sus productos de manera eficiente y ágil. Con relación a la infraestructura vial, República Dominicana parece posicionarse en una ruta certera con las inversiones que ha hecho en los últimos años.
Desde 2012 al 2018, el país ha invertido RD$82,000 millones en construcción de puentes, carreteras, caminos vecinales y en infraestructuras resilientes al cambio climático, de acuerdo a datos del Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC).
Y es que estas inversiones parecen hacer efecto, ya que República Dominicana ocupa el primer lugar en la región en infraestructura de transporte, de acuerdo con el Reporte Global de Competitividad 2019-2020, del Foro Económico Mundial (WEF por sus siglas en inglés).
En este campo, conforme al reporte, destaca al país como mejor calificado, superando 12 posiciones respecto al informe anterior. Dentro de este componente resalta la conectividad y calidad de la red vial. Específicamente en la calidad de carreteras, el país mejoró 13 puestos en comparación a la evaluación de 2018.
El estudio explica que este reporte se basa en un comparativo de 141 economías a nivel mundial con relación a los principales pilares que sustentan su posicionamiento para la generación de desarrollo económico y atracción de inversiones.
En cuanto a los resultados globales, considerando los pilares evaluados, en comparación al año anterior, el referido reporte subraya que el país mejoró cuatro posiciones, al pasar de 82 a 78. Mientras que Costa Rica bajó siete posiciones, se ubica en la número 62. Honduras mantuvo la misma posición del año anterior, la 101. Panamá bajó 2 lugares, hasta el 66. Guatemala descendió 2, colocándose en el puesto 98. El Salvador descendió 5 posiciones al pasar a la 103 y Nicaragua decreció 5 lugares, hasta el 109.
Federico Villalobos, socio de Asesoría Financiera e Infraestructura de Deloitte, asegura que el Reporte Global de Competitividad es un importante instrumento que, además, compila los resultados de la puesta en marcha de políticas en cada uno de los países evaluados.
“El hecho de que en la región solamente República Dominicana mejorara respecto del informe anterior confirma el buen desempeño de la economía y plantea el reto de consolidar esta mejoría en el mediano y largo plazos”, ponderó.
Villalobos sostiene que un marco legal para la implementación de alianzas público privadas (APP) brindará al país “una herramienta fundamental para atender los retos del futuro tanto en infraestructura de transporte como en sectores con amplias necesidades como el acceso a agua potable”.
Desempeño de la región CARD
En lo referente al componente agregado de infraestructura de transporte (carreteras, puertos, aeropuertos y ferrocarriles), República Dominicana (37) se mantiene como el mejor calificado de la región CARD, seguido por Panamá (48) y El Salvador (86).
En el sector de acceso a agua potable, Costa Rica (34) se coloca delante en la región, donde al mismo tiempo países como República Dominicana (107) encuentran en este sector un “importante rezago”.
“Cabe destacar que Costa Rica (+15) y Panamá (+7) son los países que más avanzaron en el pilar de infraestructura. Costa Rica mejora con especial fuerza en carreteras y puertos (en eficiencia portuaria sube 10 posiciones). Por su parte Panamá registra resultados positivos en cuanto a la evaluación de su red vial (+5)”, plantea el informe.
Índice Global de Competitividad
En cuanto al Índice Global de Competitividad, Costa Rica lidera la región con la economía más competitiva (con 62 de 141). Le sigue Panamá (66 de 141) y República Dominicana (78 de 141).
Explica que Costa Rica mantiene esta posición por las fortalezas históricas de su marco institucional, el nivel educativo de su población y su sistema de salud. Este país centroamericano ascendió 15 puestos en calidad global de la infraestructura, específicamente por mejoras en los sectores carreteros y portuarios.
Mientras que Panamá en calidad global de infraestructura (66 de 141), sigue como el país con mejor red de infraestructuras, debido, explica la evaluación, a su rol de centro logístico global. Por su lado, República Dominicana se posiciona como el mejor en red vial.
Retos
Según el informe, la economía mundial requerirá invertir aproximadamente US$3.7 trillones por año hacia el 2040 con el fin de atender las necesidades de obras y servicios públicos.
“Estas necesidades de recursos detonan una competencia global donde las naciones deben plantear ambientes atractivos y competitivos para lograr atraer capacidades técnicas y financieras”, precisa el documento.
Indica que el éxito en el desarrollo de infraestructura pública pasará por una sostenida inversión en las fases de adecuada planificación y preparación (se estima entre 5% y 10% de la inversión total de cada proyecto) que permita transformar las ideas de la administración pública en proyectos sólidamente estructurados en línea con la sostenibilidad fiscal, viabilidad financiera y objetivos en cuanto a niveles de servicio.
Componentes y pilares evaluados en infraestructura
Carreteras. Medida de la velocidad promedio de conectividad entre 10 o más ciudades importantes en la economía. Compara kilómetros de travesía y calidad de la red.
Aeropuertos. Indicador de conectividad de la IATA; se basa en la disponibilidad de asientos de avión por destino de viaje y eficiencia de servicios aéreos.
Puertos. Conectividad a la red marítima global y eficiencia de servicios portuarios; consulta sobre la eficiencia de los servicios portuarios por medio de entrevistas.
Ferrocarriles. Densidad de la red ferroviaria: Kilómetros de línea férrea con respecto al área total del país y eficiencia de servicios ferroviarios a través de entrevistas.
Agua. Exposición a agua insegura: Riesgo de exposición a agua inadecuada para el consumo humano y confianza en el sistema de abastecimiento de este líquido.
Energía. Porcentaje de la población con acceso a energía eléctrica de calidad. Pérdidas en transmisión y distribución como porcentaje de la oferta total de energía eléctrica. Fuente: eldinero