Mesa, Arizona. – El exjonronero dominicano Sammy Sosa ha vuelto a vestir el uniforme de los Chicago Cubs por primera vez en 21 años, en el marco de los entrenamientos de primavera del equipo. En una conversación con USA TODAY Sports, Sosa abordó el siempre polémico tema de los esteroides y la posibilidad de ser elegido al Salón de la Fama de Cooperstown.
«Es un camino muy delicado, pero nadie era ciego», declaró Sosa al referirse a la era en la que los esteroides eran de uso común en las Grandes Ligas. Aunque nunca dio positivo en pruebas de dopaje ni fue sancionado, su vínculo con estas sustancias ha afectado su elegibilidad para Cooperstown.
El comité de la Era del Béisbol Contemporáneo se reunirá en diciembre de 2025 para decidir si figuras como Barry Bonds, Roger Clemens y el propio Sosa podrán finalmente ser exaltados al Salón de la Fama en 2026. A pesar de la incertidumbre, Sosa mantiene la esperanza. «Creo en el tiempo. Nadie es perfecto. El tiempo curará todas las heridas. Realmente creo que un día la puerta estará abierta para nosotros», expresó.
El exjugador de los Cubs, quien conectó 609 cuadrangulares en su carrera y ostenta el récord de ser el único pelotero con tres temporadas de al menos 60 jonrones, también se refirió a su legado en el béisbol y su reciente acercamiento con la organización de Chicago. «Este es el equipo que me dio la oportunidad de lograr mis números. Esta es mi casa», afirmó.
Sosa, una de las figuras más influyentes en la histórica carrera de jonrones de 1998 junto a Mark McGwire, continúa siendo un referente para el béisbol. Ahora, su mirada está puesta en la votación de diciembre, esperando que el reconocimiento a su trayectoria llegue con el tiempo.
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