La audiencia contra John Infante, acusado de secuestrar a su sobrina de 13 años, se interrumpió después de que supuestamente se embarrara con heces en el tribunal de Puerto Plata.
Este hombre, según informes, se introdujo su mano dentro del pantalón y al sacarla se untó el cuerpo con materia fecal frente al juez presente en la sala. Debido a esta situación, la audiencia no pudo llevarse a cabo.
Según la información recopilada, Infante convenció a su sobrina para que se fuera con él. Tras la desaparición, familiares y agentes policiales activamente buscaron a ambos y fueron encontrados gracias a un mensaje telefónico que la adolescente envió a sus parientes, indicando que su tío la tenía secuestrada y la amenazaba de muerte.
Actualmente, la menor de 13 años está siendo evaluada por médicos tanto física como psicológicamente.
El caso de secuestro de esta menor es un acto delictivo que ha causado conmoción en la sociedad. Además, la conducta del acusado en el tribunal ha generado gran revuelo y ha puesto en tela de juicio la seguridad y el control del lugar.
Las autoridades competentes están trabajando para que se haga justicia y se determine la responsabilidad penal del acusado.
En este tipo de casos, es importante garantizar la protección y el bienestar de los menores, quienes son los más vulnerables ante situaciones de este tipo.
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