Esther Crawford era, hasta hace unos días, una de las ejecutivas de Twitter de mayor visibilidad de la era Elon Musk. Ahora es una de las más recientes víctimas.
Cuando el magnate compró Twitter por 44.000 millones de dólares en octubre del año pasado, una de las primeras decisiones que tomó fue la de echar a la mitad de los empleados de la compañía, una acción que tuvo múltiples repercusiones (incluyendo la de recontratar a algunos tres días después cuando se dieron cuenta que la compañía no podía seguir funcionando sin ellos).
Elon Musk tomó las riendas de la compañía y le pidió a los empleados que sí habían quedado que se comprometieran con la causa, es decir, con sacar a Twitter adelante en un contexto muy negativo, con la caída masiva de la facturación de la empresa por el freno de inversión que la presencia de Musk generó entre los anunciantes. Incluso llegó a poner camas en las oficinas de la compañía, para alentar a los empleados a dormir allí para trabajar más.
Una de las empleadas que transformó esa sugerencia en acción fue Esther Crawford, que tuiteó una foto suya durmiendo en el piso de la oficina, y rápidamente se hizo viral. “Cuando tu equipo se esfuerza al máximo para cumplir los plazos, a veces tenés que dormir donde trabajás”, dijo la ejecutiva; los detractores de Musk tomaron su decisión como una prueba de las malas condiciones de trabajo y el esfuerzo inaudito al que lleva a sus empleados.
Crawford fue una de las encargadas de anunciar los cambios en Twitter Blue, el sistema de suscripción de la plataforma, pero ya no lo hará más: Esta semana fue despedida de la compañía, junto con dos centenares de empleados, el 10% de la plantilla que queda después de varias restructuraciones en cuatro meses.
En Twitter, Crawford confirmó la decisión de la compañía y defendió su postura: “La peor lectura que podrías hacer al verme apostar todo en Twitter 2.0 es que mi optimismo o mi trabajo duro fueron un error. Los que abuchean y se burlan están necesariamente al margen y no en el campo de batalla. Estoy profundamente orgullosa de mi equipo por ser capaz de construir a través de tanto ruido y caos.”
When your team is pushing round the clock to make deadlines sometimes you #SleepWhereYouWork https://t.co/UBGKYPilbD
— Esther Crawford ✨ (@esthercrawford) November 2, 2022
El despido de la ejecutiva es una muestra más del turbulento momento que vive Twitter, que enfrenta deudas millonarias y el desplome de su facturación. Elon Musk ya dijo que está a la búsqueda de alguien que se haga cargo de la dirección de la compañía, mientras él vuelve a enfocarse en sus otras compañías, como Tesla o SpaceX.