Vivía una vida normal, como todo hombre que vive solo, Fernando iba del trabajo a su casa. Pero un día todo cambio.
El mencionado residía en el municipio de los Alcarrizos. Entraba y salía de su casa como era su costumbre. Los vecinos veían esta acción normal en su diario vivir. En una ocasión, un vecino lo alcanzo a ver triste y cabizbajo y vio cuando Fernando entró a su casa, pero no lo volvió a ver. De manera que este estaba desaparecido desde el pasado miércoles.
Lamentablemente, lo encontraron muerto, en avanzado estado de descomposición, en su residencia. Dicen los vecinos que el no tenia problemas con nadie, pero tocara a la autoridades investigar el caso y ver que fue lo que realmente sucedió, si intervinieron manos criminales o si se trató de un suicidio.
El suicidio en República Dominicana se ha convertido en uno de los problemas más notable de los últimos tiempos, evidenciado por un incremento considerable de los casos que se registran cada día, que han alcanzado niveles alarmantes, llenando de luto e incertidumbre a las familias afectadas.
“Cada cabeza es un mundo”, dice un refrán popular, y este dicho es una clara evidencia de que son muchas y muy distintas las causas que motivan a una persona a suicidarse, aunque la depresión, sin importar el motivo, sea el combustible para todo pensamiento suicida.
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